Éstos son algunos de los elementos que pueden alentar a las organizaciones a adoptar la norma:
- ISO, como un organismo internacional, tiene una reputación bien establecida y una credibilidad en todo el mundo. Lógicamente, las organizaciones estarán motivadas a unirse para obtener una buena imagen y reputación. Por otra parte, en su página web, ISO lista algunas ventajas relacionadas con la implementación de la norma.
- La nueva norma fue desarrollada por un consenso internacional. Muchas otras herramientas o guías especializadas en desarrollo sostenible fueron construidas de esta manera. De hecho, ISO 26000 promueve la convergencia de visiones y puede ser aplicada en una variedad de contextos.
- Las directrices de la norma ISO 26000 proporcionan una oportunidad para revisar los principios y objetivos de la responsabilidad social de forma concisa y cambiar a una visión pragmática que se puede aplicar realmente.
Sin embargo, varios factores pueden haber creado una cierta reticencia a trabajar con la norma ISO 26000:
- Según lo especificado por ISO en el momento de su publicación, la norma ISO 26000 no es comparable a las normas de sistemas de gestión y no está destinada a la certificación. En otras palabras, nadie será capaz de verificar la aplicación de la norma dentro de las organizaciones o emitir un certificado de conformidad.
- As ISO 26000 is not intended to replace other tools and standards in social responsibility, organizations must be vigilant in their choice of approaches and have to be ready to work with different tools with different levels of adequacy.
- La norma no ofrece una guía detallada para la aplicación de medidas operativas, porque su objetivo tiene con un alcance muy amplio y es para organizaciones de todo tipo. Entonces, hay mucho trabajo que hacer dentro de las organizaciones para que sean capaces de reflejar la norma en sus prácticas cotidianas.
- ISO 26000 no intenta sustituir a otras herramientas y estándares de responsabilidad social. Las organizaciones deben ser vigilantes en su selección de enfoques y estar listas para trabajar con diferentes herramientas que tienen diferentes niveles de adecuación.
Desde su publicación en el otoño pasado, varios abusos de comunicación han sido hechos por algunas empresas en cuanto a su adhesión a la norma, así como intentos de algunas empresas de consultoría ofreciendo certificación, aunque esta práctica está prohibida por ISO.
Una cuestión fundamental surge de estas observaciones: ¿A través de qué medio seremos capaces de medir el éxito o el fracaso de la integración de la ISO 26000? ¿Podemos contar en el número de organizaciones que hacen referencia a la norma en sus comunicaciones, o en su lugar, vamos a tratar de observar mejor las mejoras de las prácticas empresariales de las organizaciones en términos de responsabilidad social a medida que pasan los años?
Caroline Chaumont, Borealis
CONSULTEN, OPINEN , ESCRIBAN .
Saludos
Rodrigo González Fernández
Diplomado en "Responsabilidad Social Empresarial" de la ONU
Diplomado en "Gestión del Conocimiento" de la ONU
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